En el año de 1910, el entonces presidente de México, general Porfirio Díaz vino a la capital del estado para inaugurar inmuebles como el Teatro Juárez, el monumento a la paz y Miguel Hidalgo que se encuentra en la Presa de la Olla.

Desde entonces, el mercado ha sido un ícono histórico en la ciudad, además de ser una parada obligada para los turistas que visitan la capital del estado.

Lamentablemente este histórico lugar se encuentra en pésimas condiciones, teniendo “arreglitos” esporádicos de parte de las administraciones.

Cada tres años, alcaldes que pasan por la silla presidencial de Guanajuato, invierten millones para “rescatar” este icónico lugar.

Desde el año 2019, el alcalde capitalino, Alejandro Navarro Saldaña ha estado invirtiendo millones de pesos en una restauración en la que no se han visto resultados.

Este año empezó la restauración de la torre del reloj, en la cuál invirtieron poco más de 7 millones de pesos y actualmente está roto y en pésimas condiciones.

En el interior del mercado no se ven mejoras, pisos, ventanales y el techo están en pésimas condiciones. Los techos de los locales y gran parte de la fachada están llenos de suciedad de las aves que sobrevuelan dentro de este centro de abastos.

Así es como cumple 114 años este histórico lugar, completamente en el olvido, tanto de autoridades como los propios locatarios que no hacen un mínimo esfuerzo para mantener sus espacios en buenas condiciones.