Las inundaciones provocadas por las intensas lluvias que golpean el sur de Brasil dejaron al menos 56 muertos y 67 desaparecidos, según un nuevo balance el sábado de Defensa Civil.

El desastre climático mantiene interrumpidas carreteras y comunicaciones en el estado Rio Grande do Sul, con casi 300 localidades afectadas.

El rápido ascenso en las últimas horas del río Guaíba, enclavado en la ciudad, anegó el centro histórico.

Numerosas calles de otros sectores amanecieron bajo agua y los residentes se empeñan por evacuar sus viviendas.


Se trata posiblemente de la mayor inundación de la historia de Porto Alegre.